Este título forma parte de una expresión trágica que todos asumimos por un olvido o falta de imaginación que Dios nos ha dotado.
Ayer pregunté a un hijo de una persona muy conocida por mí ¿Qué tal seguía su padre? Me respondió que ya hacía tres meses que había muerto. Este señor padecía de la vista y hace unos cinco meses se despidió de mí, alegando que ya no veía y que había decidido no salir más a la calle.
En otra ocasión también llamé por teléfono a otro conocido del que necesitaba unos datos, me respondió su mujer que ya hacía dos años que había fallecido.
A veces noto, que no veo a algunos habitantes que sin tener amistad con ellos observo sus ausencias por las calles. ¿Habrán fallecido?
Una vez, vi en la pizarra mortuoria el anuncio de una persona, coincidía nombre y apellidos. Lo di por muerto, pero a los dos años en la feria local, lo veo venir hacía nosotros, con su mujer y amigos... Me quedé de piedra, comprendí que el fallecido al que leí en la pizarra tenía sus mismo nombre y apellidos.
Los años pasan y tenemos que morir, pero nunca pensamos en ello, creemos que sólo les pasará a otros.
Ayer pregunté a un hijo de una persona muy conocida por mí ¿Qué tal seguía su padre? Me respondió que ya hacía tres meses que había muerto. Este señor padecía de la vista y hace unos cinco meses se despidió de mí, alegando que ya no veía y que había decidido no salir más a la calle.
En otra ocasión también llamé por teléfono a otro conocido del que necesitaba unos datos, me respondió su mujer que ya hacía dos años que había fallecido.
A veces noto, que no veo a algunos habitantes que sin tener amistad con ellos observo sus ausencias por las calles. ¿Habrán fallecido?
Una vez, vi en la pizarra mortuoria el anuncio de una persona, coincidía nombre y apellidos. Lo di por muerto, pero a los dos años en la feria local, lo veo venir hacía nosotros, con su mujer y amigos... Me quedé de piedra, comprendí que el fallecido al que leí en la pizarra tenía sus mismo nombre y apellidos.
Los años pasan y tenemos que morir, pero nunca pensamos en ello, creemos que sólo les pasará a otros.