Regalo de MORGANA

Regalo de MORGANA
Gracias por tu regalo, me hace ilusión y cada vez que lo miro te recuerdo.

miércoles, 27 de mayo de 2009

ÁRBOLES

TEJO



Después de los animales ahí están lo árboles, haciéndonos compañía entre otros muchos motivos de valor.
Siempre se han oído voces clichés de que es muy importante escribir un libro y plantar un árbol.

Sobre este tema podía escribir varias partes, pero no lo estimo de esa manera, por lo que, resumiré en lo posible.

Aunque tengo en mi terreno el cultivo de siete árboles, participé en una visita guiada por un parque para que un profesor nos diera las explicaciones necesarias para conocer todos los datos de más de cincuenta árboles qué, con sus verdosas grandezas nos cobijaban del sol y no ofrecían sombra en agradecimiento a los cuidados del jardinero.


Me llamó la atención el Árbol del Amor (Cercis silicuastrum) sólo había uno, por no ser propicio en estas tierras. Tiene hoja caduca y no pasa de los 8 metros de altura, ramas de color rojiza, hojas en forma de corazón, flores hermosas, rosadas que nacen antes que las hojas en marzo. Dice la tradición que de uno de estos árboles se ahorcó Judas.
Había varias acacias, la Acacia Falsa (Robina pseudoacacia) de hasta 20 metros, recuerdo que de niños comíamos los racimos de flores blancas, estaban buenas y las llamábamos quesillos.

Acacia Mimosa de hojas perennes de aspecto plumoso, flores redondeadas de color amarillo. Se usaba el día de los quintos los mozos llevaban colocada sobre el pecho una ramita y todos cantaban por las calles en grupos. En Galicia crecen de forma espontánea y hasta forma plaga.

Y el Tejo, es un árbol de hojas perennes de ocho metros de altura, hojas verdes,estrechas y pequeñas, dan un fruto parecido a una bellota verde pequeña y envuelta por una formación roja. Todas las partes de este árbol es tóxico y mortal menos el arilo rojo que consumen los pajarillos.

Los mozos del norte de Extremadura subían al monte y traían una ramita que entregaban a la mujer elegida para su noviazgo, si aceptaba, conseguía su pareja, sino aceptaba tenía que dar la ramita a otra joven. De aquí la frase de "TIRAR LOS TEJOS A ALGUNA MUJER".

Es interesante que un guia nos explique por donde pasamos para evitar nuestra ignorancia ante monumentos, calles, plantas etc.










lunes, 18 de mayo de 2009

La excursión de ayer




La mañana se presentaba con nubes, los autobuses marchaban raudos pasándose pueblos pequeños de casas bajas, de fachadas misericordiosas, puertas de insuficientes alturas, de chapa color marrón que han traído los tiempos modernos, pequeñas ventanas y eso si, muy blanqueadas y con sus zócalos que siempre pintan sus propietarios.

Los viajeros se mostraban alegres, cual alguna voz graciosa que arrancaba sonrisas.

La primera parada fue Olivenza, un pueblo bonito que en tiempos pasado perteneció a Portugal, allí a las nueve de la mañana todos los bares estaban cerrados, sentíamos prisa por hacer un pis y tomar un café con leche, dos guardas municipales nos indicaron el lugar donde se ubicaba un hotel pequeño y familiar. Unas casas más abajo compramos la famosa Tecula-Mecula una tarta que hacían los romanos. Visitamos el museo etnográfico que exponen en el interior del castillo.

La siguiente parada fue en Cheles (qué también hace frontera con Portugal), donde embarcamos para atravesar el lago artificial Alqueva, el más grande de Europa, fue una travesía muy romántica donde dimos alimento a la vista.

Desembarcamos en unas instalaciones precarias de Portugal, allí otra vez nos esperaban los autobuses. Llegamos a un mirador donde aparcaron los vehículos. Subimos andando hasta el pueblo de Monsaraz que expongo aqui la fotografía, era un peñón, en la altura contemplamos las panorámicas de divina belleza: a un lado la llanura verdosa con constantes manchas azules que pinta el lago, al otro lado, todo llanura también del color de la tierra rojiza, algunos pueblos que divisiban como piropos blancos y las alineaciones de encinas milenarias.

El pueblo puramente turístico sólo tenía tres calles paralelas: una de tres metros de anchura posiblemente construido en la Edad Media; las mismas pizarras grises del suelo eran las que formaban las casitas sin ventanas, la calle central era más ancha, tenía ventanas pero las mismas piedras que la anterior y la otra calle y mirador a la vez, consigue emborrachar al turista de sensaciones puramente estéticas.

La comida del Medio día la hicimos en una finca de Cheles, llevábamos nuestras mesas y nuestras sillas. Juntamos nuestras comidas caseras: Empanadillas, tortillas, lomo, chorizo de las matanzas, gazpacho, vino de propia crianza y gañotes (dulces caseros) que hizo Eusebia para hartarnos a todos. Los del pueblo celebraban San Isidro, tenían un equipo de música, por lo que, mi mujer y yo bailamos muchos adornos del pasodoble que los demás supieron felicitarnos.

El regreso lo hicimos por Jerez de los Caballeros y durante una hora y media, Eusebía se hizo la dueña del micrófono del autobús y nos contó chistes muy graciosos.